Carne de bovino. Las carnes rojas son un alimento que nos aporta muchos nutrientes si lo consumimos correctamente; por ello, te presentamos algunos de los beneficios que te aporta su consumo:
- Es una fuente de vitamina B12; esta vitamina nos ayuda a metabolizar proteínas, a formar glóbulos rojos y a darle mantenimiento al sistema nervioso central.
- Es rica en zinc, que ayuda a protegernos contra el daño oxidativo, a la cicatrización de la piel y para crear hemoglobina.
- Aporta hierro, un elemento importante para mantener un adecuado transporte de oxígeno en nuestra sangre.
En cuanto a la producción de carnes rojas en México encontramos que en 2017:
- La producción de carne bovina superó el millón 980 mil toneladas
- La producción de carne ovina sobrepasó las 62 mil toneladas
- La producción de carne porcina fue mayor al millón 502 mil toneladas
Recuerda que debes tener una dieta balanceada para mantenerte sano, pues nada en exceso es bueno..
¿Cuáles son los principales nutrientes de la carne?
La carne es parte importante de la dieta humana, pues proporciona numerosos nutrientes como: proteínas, vitaminas, minerales, lípidos y pequeñas cantidades de carbohidratos; además algunos de estos son más biodisponibles (fácilmente absorbidos y utilizados) que en otras fuentes de alimentos.
¿Que nos aporta la carne roja?
Los pro del consumo de carnes rojas – Más allá de todas las desventajas que un consumo excesivo de carnes rojas puede ocasionar, es claro que si somos moderados en su ingesta, las carnes rojas también tienen buenos nutrientes y algunos beneficios para ofrecernos.
Por ejemplo, las carnes rojas son ricas en proteínas de calidad y sobre todo, son una excelente fuente de hierro que contribuye a prevenir o controlar estados de anemia. Por otro lado, la carne roja es rica en potasio , en fósforo y zinc y ofrece vitaminas del complejo B como ácido fólico, B12, B1, B2 y B5.
Asimismo, en pequeñas cantidades aporta vitamina D y E a la dieta. Por supuesto, dado su contenido proteico y su aporte de purinas, las carnes rojas tienen alto poder saciante , lo que implica que sacian fácilmente y mantienen al aparato digestivo ocupado por largo tiempo. .
¿Qué hace la carne en el cuerpo humano?
La carne es una importante fuente de proteína, un nutriente esencial para el correcto funcionamiento del cuerpo en las actividades del día a día. El requerimiento de proteína de una persona varía según la edad, el peso y la actividad física, pero siempre es necesario alcanzarlo, por lo que el consumo de carne junto con verduras, frutas y cereales, es una excelente opción, ya que el 20% de sus nutrientes es proteína de alta calidad y digestibilidad.
Sin embargo, la carne es mucho más que proteína, ya que cuenta con muchos otros nutrientes, que ayudan al crecimiento celular, síntesis y regeneración de tejidos, y que también ayudan a fortalecer el sistema inmunológico, a acelerar la cicatrización, y por si fuera poco, mejoran el desarrollo físico y mental a largo plazo.
Algunos de estos nutrientes son aminoácidos esenciales, vitaminas, minerales y ácidos grasos esenciales como el omega 3. Por lo tanto, al ser un alimento que aporta tantos beneficios, la carne es un elemento con un papel importante dentro de una dieta balanceada..
¿Qué proteínas nos da la carne?
En nuestro país, el consumo de carne vacuna (70 kg/habitante/año) es una característica tradicional de la alimentación. Las carnes se caracterizan por ser el grupo de alimentos que aporta proteínas de alta calidad y la mejor fuente de hierro. Sin embargo, la anemia está presente en la mitad de nuestras embarazadas y el consumo de hierro es insuficiente en el 90% de los niños menores de dos años.
Es decir que el consumo de carne, como dato estadístico, oculta las diferencias de ingesta de los diferentes niveles socioeconómicos. Por un lado, una parte de la población se enferma por exceso de proteínas y grasa saturada (obesidad, colesterol, gota) y por otro, un número cada vez mayor de argentinos que se encuentra bajo la línea de pobreza, sufre las consecuencias de la falta de proteínas y hierro en su alimentación básica.
La propuesta es analizar los diferentes tipos de carnes para poder ajustar su consumo, sin excesos pero sin carencias en la alimentación cotidiana. ¿Qué son las carnes? Bajo esta denominación se incluyen a la parte muscular de todo animal comestible (vaca, cerdo, aves, pescado, cordero, animales de caza), las vísceras (hígado, riñón, etc.
- ) y productos derivados (fiambres y embutidos);
- ¿Qué aportan a la alimentación? – Proteínas de alto valor biológico y en una alta proporción: 20 g de proteína cada 100 g de carne;
- – Hierro de fácil absorción;
– Otros minerales: zinc, potasio, y selenio. – Vitaminas del grupo B: B1, B2, B3 y B12. – Grasas saturadas en su mayoría, pero en porcentajes muy variables según los cortes y el tipo de carne, y con diferencias muy importantes en su composición química. Este grupo de alimentos no aporta hidratos de carbono, ni fibra ni calcio.
¿Cuántas proteínas debemos consumir? El requerimiento de un adulto es de 1 gramo de proteínas / kg / día. Por lo tanto con sólo 160 gramos de carne (32 gramos de proteínas), más las porciones de lácteos, de cereales y el resto de los alimentos, cubrimos perfectamente las necesidades de la mayoría de los adultos.
El hierro y los alimentos Puede estar presente en dos formas: – hem: se encuentra en las carnes y vísceras. – no hem: en los vegetales de hoja verde, las legumbres y el huevo. La absorción del hierro hem es más eficiente y no es influenciada por otros alimentos de la misma comida.
El hierro no hem no sólo se absorbe menos sino que depende de la presencia de factores facilitadores (vitamina C, carnes) e inhibidores, como los taninos (te, café, chocolate), fitatos y oxalatos (legumbres, verduras de hoja verde, granos).
Vísceras Se pueden clasificar en vísceras rojas: hígado, riñón, estómago de rumiante (mondongo), lengua y corazón; y vísceras blancas: criadillas o testículos, timo (molleja), intestino delgado (chinchulín), recto (tripa gorda) y sesos. El valor nutricional es semejante al de las carnes, con un aporte de proteínas similar (20 g / 100 g), aunque con mayor de grasas saturadas y colesterol en las vísceras blancas.
El contenido en purinas es más elevado que en las carnes, lo que debe tenerse en cuenta cuando existen problemas de ácido úrico. El contenido de hierro es mayor que en las carnes, llegando hasta valores de 9 mg / 100 g en el hígado; y también es elevado el contenido de vitamina B12 y vitamina A.
Embutidos Consisten en un picado de carne, generalmente de cerdo, que se introduce en segmentos de tripa animal o en preparados sintéticos, y al que se le agregan otros componentes: grasas animales, harinas, sangre, especies aromáticas que además de otorgar sabor y aroma específicos son poderosos antibacterianos.
Se pueden agrupar en dos clases: FRESCOS COCIDOS (salchichas, morcillas) y SECOS (chorizos, salame). Aportan proteínas de alta calidad y hierro de buena disponibilidad, aunque los elevados niveles de grasas saturadas y sodio hacen aconsejable limitar su consumo.
Aves y cerdos Los animales de corral incluyen: pollo, gallina, pato, pavo, pavita, ganso, conejo y cerdo. Tienen la particularidad de que la cantidad y composición de su grasa puede variar sustancialmente con el tipo de alimentación y que al ubicarse principalmente bajo la piel, se puede retirar fácilmente.
- Pescados y mariscos Engloba todas las especies comestibles de la fauna marina y de agua dulce;
- El valor nutricional en cuanto a proteínas de alta calidad es similar al de la carne pero con mejor digestibilidad por su menor contenido de tejido conectivo, y dentro del mismo, menos elastina que colágeno;
El contenido de grasa de las distintas especies es muy variable y en función de ésta pueden dividirse en pescados magros (menos de 2%): bacalao, brótola, corvina, merluza, lenguado y abadejo; semigrasos (2 a 7%): trucha, arenque, bonito y boquerón; y grasos (9 a 12%): salmón, caballa, arenque, atún, anguila y sardina.
A diferencia de la grasa presente en otras carnes y derivados, es de tipo poliinsaturada de la familia omega 3, lo que es una necesidad biológica para estos animales, de modo que no se solidifiquen a la temperatura del fondo del mar.
Se ha comprobado el efecto favorable de la introducción de estas grasas en la dieta cotidiana, especialmente para la prevención de aterosclerosis. El aporte de calcio es mínimo en las especies de tamaño grande pero pueden ser una fuente de este mineral los pequeños que se comen con espinas, como sardinas y cornalitos.
Contienen cantidades importantes de zinc, magnesio, selenio y hierro, aunque algo menos que las otras carnes. Los pescados grasos son fuente de vitaminas B12, A, D y E. ¿Y los mariscos? Se incluyen crustáceos (camarón, cangrejo langostino, langosta y centolla) y moluscos (almejas, mejillón, calamar, ostra, pulpo, berberecho).
Son una excelente fuente de minerales, proteínas de buena calidad y diversas vitaminas del complejo B. Aportan muy poca grasa y de tipo poliinsaturada. ¿Y cuál debería ser el lugar de las carnes en nuestra alimentación? El que nos proponen las Guías Alimentarias para la Población Argentina: consumir una porción diaria de carne representada por el tamaño de la palma de la mano, quitándole la grasa visible y con la siguiente frecuencia semanal (pescado 2 o más veces por semana, otras carnes blancas 2 veces por semana y carnes rojas hasta 3 veces por semana). .
¿Cuánto aporta la carne?
Carne, fuente de proteínas de alto valor biológico – La carne es una fuente importante de proteínas de alto valor biológico. Dentro de las vitaminas y proteínas de la carne aporta en mayor proporción vitaminas como B6 y B12, además de vitamina A. También posee pequeñas cantidades de otras vitaminas como vitamina E, el ácido pantoténico y la biotina.
¿Qué tipo de alimento es la carne?
CARNES, HUEVOS Y PESCADOS (grupo 2): –
- Carnes : son alimentos plásticos y proporcionan una gran cantidad de proteínas de alto valor biológico, vitaminas y minerales. Además en función del tipo de carne consumida nos proporcionará en mayor o en menor medida grasas, cuya proporción dependerá también del tipo de elaboración del alimento. La proporción de proteínas de las carnes oscila entre un 16-22% y son de alto valor biológico; tanto la carne de las aves como las de vacuno y porcino tienen la misma cantidad de proteínas, lo que varía es la proporción de grasas.
- Embutidos : productos elaborados con carne y grasa de distinta procedencia en distintas proporciones y con distintos aderezos, y secados posteriormente. Su composición es variable pero suelen tener un grado variable de grasa y proteínas y menos de hidratos de carbono.
- Huevos : el huevo es rico en proteínas que se encuentran fundamentalmente en la clara, sin embargo, en la yema predominan la grasa y el colesterol, vitaminas y hierro.
- Pescados : en este grupo podemos incluir los pescados y los mariscos (crustáceos y moluscos). Tienen un alto porcentaje de proteínas y son muy ricos en fósforo, sodio, yodo, potasio y hierro. El esqueleto de los peces si lo comemos nos aporta una importante cantidad de calcio. Los moluscos tienen más cantidad de proteínas y de colesterol que el pescado y son ricos en cinc, cobre y calcio.
Las menos grasas son las de vacuno, caballo, pollo (sin piel) y conejo y las más grasas son las de cerdo, cordero y pato. Las vísceras fundamentalmente aportan proteínas pero en el caso del hígado, riñones y corazón son ricas en hierro y vitaminas del grupo B y sin embargo, los sesos y las criadillas tienen gran cantidad de grasa y colesterol.
Los pescados tienen ácidos grasos omega-3, sobre todo en aquellos pescados azules o grasos. Estos ácidos grasos tienen efecto cardioprotector.
¿Cuáles son los beneficios de no comer carne?
El factor salud – Una alimentación basada en productos de origen vegetal que enfatiza el consumo de frutas, verduras, cereales, frijoles, legumbres y frutos secos, tiene un alto contenido de fibra, vitaminas y otros nutrientes. Y las personas que no comen carne – los vegetarianos – por lo general consumen menos calorías y menos grasa, son más delgados y tienen un riesgo más bajo de padecer enfermedad cardíaca en comparación con los no vegetarianos.
Incluso reducir el consumo de carne ya ejerce un efecto protector. En las investigaciones se ha podido observar que las personas que consumen carnes rojas tienen un riesgo más elevado de morir por causa de enfermedad cardíaca, accidente cerebrovascular o diabetes.
Las carnes procesadas también aumentan el riesgo de fallecer por causa de alguna de estas enfermedades. Y lo que no comes también puede dañar tu salud. Una alimentación baja en frutos secos, semillas, mariscos, frutas y verduras también aumenta el riesgo de muerte.
¿Qué pasa si una persona deja de comer carne?
Aumentarás tu esperanza de vida – Comer menos carne reducirá tu riesgo de sufrir enfermedades cardíacas, cáncer y obesidad, y además te ayudará a vivir más tiempo. Algunas investigaciones han demostrado que comer muchos alimentos de origen vegetal repletos de ácidos grasos monoinsaturados, como el aguacate y las nueces, está relacionado con una menor probabilidad de morir por enfermedades cardíacas u otras causas.
Por contra, las dietas ricas en ácidos grasos monoinsaturados de fuentes cárnicas, como huevos, lácteos enteros y carnes rojas, se relacionan con un mayor riesgo de las enfermedades mencionadas. Al respecto, la OMS considera la carne procesada como potencialmente cancerígena , ya que “hay pruebas convincentes de que causa cáncer.
La evaluación se basa generalmente en estudios epidemiológicos que muestran el desarrollo de cáncer en humanos expuestos”. Asimismo, y de acuerdo con las estimaciones más recientes del Proyecto sobre la Carga Global de Enfermedad, una organización de investigación académica independiente, cerca de 34.
000 muertes por cáncer al año en todo el mundo son atribuibles a dietas ricas en carne procesada. “Comer carne roja aún no se ha establecido como una causa de cáncer. Sin embargo, si se demostrara que las asociaciones reportadas son causales, el Proyecto sobre la Carga Global de Enfermedad ha estimado que las dietas ricas en carnes rojas podrían ser responsables de 50.
000 muertes por cáncer al año en todo el mundo”, detalla la OMS.
¿Qué carne alimenta más?
¿Qué carne tiene más proteínas? – La de conejo encabeza la lista con 33 gramos de proteínas por cada 100 aproximadamente, seguida del pavo, 29, pollo, 27, cerdo, 27, y ternera, 24. Así que punto para la carne de conejo.
¿Qué pasa si no como carne ni pollo?
Red de salud – Aportes nutricionales de la carne – 04-09-15
Déficit de nutrientes – Al no consumir carne se puede producir un déficit de nutrientes necesarios para el correcto funcionamiento de tu organismo. En general, es posible padecer deficiencia de yodo, hierro y vitaminas D y B12. Por fortuna, es posible equilibrar esta situación planeando de forma minuciosa la alimentación.
¿Qué tipo de nutrientes tiene la carne de res?
¿Qué nutrientes tienen las carnes rojas y blancas?
Tanto las carnes rojas como las blancas constituyen un excelente aporte de proteínas de alta calidad y por este motivo su consumo es importante de cara a mantener una dieta equilibrada. Además de las proteínas, aportan minerales y vitaminas esenciales para el buen funcionamiento de nuestro organismo.
Las carnes rojas hacen referencia a carne de vacuno, buey, caballo y a carne de caza (perdiz, codorniz, etc. ), incluso a vísceras. La carne considerada o llamada blanca es la carne de pollo, pavo o conejo.
La carne de cordero o cerdo puede variar en coloración, siendo roja o blanca dependiendo de la edad del animal o de la parte del cuerpo. Las carnes rojas y las vísceras contienen más cantidad de hierro que las blancas. También contienen en general más grasa y mayor cantidad de purinas.
- Las purinas son un producto de degradación de las proteínas y contribuyen a la formación de acido úrico, de ahí que los enfermos de gota deban abstenerse del consumo elevado de carne roja, ya que al tener cristales de ácido úrico en las articulaciones padecen artritis o inflamación de las articulaciones y el consumo elevado de carne roja puede empeorar estas patologías;
La mayor cantidad de grasa y sangre de la carne roja le da a ésta más sabor y la hace más sabrosa, que por ejemplo la carne de pollo. En términos generales, se recomienda el consumo de tres o cuatro raciones por semana de carne, permitiéndose que sea carne roja tres o cuatro veces al mes.
- Se considera más saludable el consumo de carne blanca, ya que ésta posee similar valor nutricional pero contiene menos grasa y menos purinas, que consumidas en exceso se relacionan directamente con la aparición de enfermedades cardiovasculares;
Dr. Alfonso Pérez. Médico y director de equipo de EAP Roselló (CAPSE – Hospital Clínico de Barcelona).
¿Qué proteínas tiene la carne roja?
Ternera de vaca – Una de las carnes clásicas a la hora de comer nuestra ración de proteínas. Tanto las blancas como las rojas poseen entre 20 y 22 gramos de proteína por cada 100 gramos. Eso sí, la pirámide alimentaria dice que lo mejor es no pasarnos a la hora de comer carnes, por lo que hemos de limitar su consumo..
¿Qué vitaminas contiene la carne de vaca?
La carne de vacuno es un alimento saludable con innumerables propiedades nutricionales ya que aporta fundamentalmente proteínas de alto valor biológico, vitaminas y minerales. Además, incorpora en la alimentación vitaminas, como A, D, E, K, C y del grupo B, especialmente B12, esencial en la formación de los glóbulos rojos y el correcto funcionamiento del sistema nervioso.
Los alimentos que ingerimos deben ser seguros y proporcionar nutrientes, dentro de una alimentación variada, equilibrada y suficiente. La composición de la carne de vacuno permite que pueda contribuir positivamente a una buena alimentación.
Aporta fundamentalmente proteínas de calidad, minerales, entre los que destaca el hierro, fácilmente absorbible y utilizable, además de otros, como zinc, magnesio, potasio, fósforo, selenio, y vitaminas del grupo B, especialmente B12. Las proteínas de la carne de vacuno son de alto valor biológico.
Esta elevada calidad nutricional viene determinada por su buena digestibilidad y porque aportan todos los aminoácidos esenciales y en una proporción adecuada a las necesidades del ser humano. El contenido en hidratos de carbono es muy bajo, lo cual permite combinar la carne de vacuno con fuentes de los mismos (vegetales), complementando su valor nutritivo.
El hierro es uno de los valores clave de las carnes en general y de la de vacuno (que contiene 2-4 mg/100g) en particular. La forma en la que se encuentra este hierro permite que se absorba un 20-30% del mismo, mientras que el de los vegetales sólo se absorbe en un 1,5% (llega al 7% en el caso de la soja).
Las necesidades diarias de hierro son de unos 10 mg/día, siendo de hasta 18 mg en adolescentes y, especialmente, en las mujeres en periodo fértil. Por lo tanto, unos 100 gramos de vacuno pueden aportar más del 20% del hierro necesario en un día.
Además, la presencia de carne favorece la absorción de las formas de hierro de los vegetales, lo que justifica su asociación con verduras y hortalizas. Si no se consume carne puede haber riesgo de no disponer de la cantidad suficiente de hierro. Otro aporte importante de la carne, especialmente de la de vacuno, es el de zinc (100 g pueden llegar a cubrir el 30-40% de las ingestas diaria recomendada), así como de magnesio, potasio, cobre y otros minerales y microelementos (selenio y otros).
La carne de vacuno aporta vitaminas hidrosolubles del grupo B. Tiene especial interés el contenido en vitamina B12, que no se encuentra en productos vegetales, salvo si son fermentados. La práctica totalidad de los cortes de carne de vacuno contienen unos 2 microgramos por 100 gramos.
Las necesidades medias diarias de una persona adulta son de unos 2 microgramos, que se cubren con unos 100 gramos de carne de vacuno. Por lo tanto, la vitamina B12 es otro de los valores nutricionales clave de la carne de vacuno, junto con el hierro y las proteínas.
- La carne de vacuno es un alimento saludable consumido en las cantidades apropiadas, junto a un estilo de vida activo;
- Su ingesta complementada con una amplia variedad de alimentos vegetales, la carne de vacuno encaja perfectamente en ámbito de la denominada “Dieta Mediterránea” se adecúa a cualquier grupo de población independientemente de su género y edad;
También es conveniente para personas activas y para aquellas que realizan actividades deportivas. En definitiva, la carne de vacuno es necesaria para mantener una correcta nutrición y es un alimento que ofrece gran versatilidad en términos gastronómicos.